“Estamos haciendo el trabajo de recoger la diversidad que tenemos dentro del Manuel de Salas, escuchar, acoger y sobre todo valorar”
Ineldy Correa, Psicóloga Unidad de Género y Sexualidades, con más de 15 años de experiencia trabajando con población infanto juvenil y amplio conocimiento en temáticas de género, sexualidad, violencia y abuso sexual infantil, analiza el escenario actual del LMS y los desafíos de la UGESEX.
Tras la solicitud de la Comunidad del Liceo Experimental Manuel de Salas, de incorporar a una profesional exclusiva para abordar los procesos que conllevan las denuncias por temas de género y sexualidad en la institución, en agosto del 2018 el LMS recibió a Ineldy Correa, la nueva Psicóloga de la Unidad de Género y sexualidades (UGESEX).
Sus formación inicial, en la Universidad de Santiago, se complementa con estudios en Adolescencia y violencia, Intervención familiar en Abuso Sexual Infantil y Prevención en Violencia de Género y en ESCNNA. Así mismo, cuenta con experiencia de más de 15 años trabajando con población infanto juvenil y sus familias en temáticas asociadas a vulneración de Derechos.
“Me encontré con una Comunidad muy sensibilizada, donde la temática de género y diversidad sexual están muy presentes, son muy cotidianas”, señala la psicóloga que, a un mes de su incorporación, ya se encuentra trabajando activamente con sus 11 compañeras, elegidas democráticamente como representantes de los estamentos liceanos en la UGESEX.
Sin embargo, afirma que “hay un largo camino por recorrer, construir, enfrentar, y mirar entre todos y todas, siempre recogiendo todas las necesidades y propuestas”, mientras da énfasis en la relevancia de poder aportar de desde su mirada profesional al desarrollo de esta innovadora propuesta, para seguir colaborando en la incorporación de estas temáticas en el quehacer educativo cotidiano del LMS.
¿Cómo están abordando el trabajo inicial de la UGESEX con la Comunidad?
Estamos haciendo el trabajo recoger la diversidad que tenemos dentro del Manuel de Salas, escuchar, acoger y sobre todo valorar. Estamos procurando que todos los puntos de vista y las voces sean incluidas, con el objetivo de que desde aquí podamos construir entre todos y todas.
De esta manera podremos hacer que realmente toda la Comunidad esté inserta en los cambios, tanto institucionales como de perspectiva, para que en la convivencia cotidiana nos encontremos en un trato de respeto, de dignidad con el otro/a, pero sobre todo de valoración hacia las diferencias o disidencias que existen en nuestra propia Comunidad.
¿Cuál es la importancia de la participación de un/a psicólogo/a en unidades como ésta?
Es altamente valorable que la Comunidad haya solicitado un profesional dedicado especialmente a esta temática, no es una realidad que ocurre en todos los colegios, probablemente seamos unos de los primeros en que tengamos un psicólogo de dedicación exclusiva para pensar el género y la sexualidad en la institución educativa, formativa.
En ese sentido es altamente relevante que un/a especialista en el tema pueda aportar la mirada desde el saber de los psicológico y de las ciencias humanas y sociales. La sensibilidad que hay, se debe complementar con miradas de estudios, conocimientos, saberes. Por otro lado, también es importante acompañar más profesionalmente estos procesos, inquietudes y necesidades.
La UGESEX es multiestamental pero, ¿dónde está el foco de acompañamiento?
El acompañamiento es para todos y todas, pero la sensibilidad y el foco siempre está puesto primero en nuestros/as estudiantes. Antes que todo, este es un espacio formativo de niños, niñas y adolescentes, y la sensibilidad siempre va a estar para con ellos/as primero, pero es abierto a toda la Comunidad. Por eso somos multiestamentales. Pero insisto, siempre la primera mirada está enfocada en nuestro niños, niñas y adolescentes.
Las nuevas generaciones tienen más incorporado que estas temáticas tienen que ver con Derechos, ¿cómo generar sensibilidad en profesores y funcionarios/as?
Las nuevas generaciones hoy se encuentran con un camino que hemos recorrido otras generaciones, que los posibilita a situarse en un lugar distinto al de nosotros/as cuando fuimos niños, niñas y adolescentes. En ese sentido las y los adultos tenemos que estar con los sentidos bien abiertos, porque ellos y ellas hoy nos plantean otros desafíos, otras necesidades, que para nosotros/as fueron distintas.
Ellos y ellas hoy nos instalan otros temas, de los que tenemos que hacernos cargo como comunidad. Para eso, tenemos que saber escuchar y dar una respuesta lo más oportuna y más pertinente posible, acogiendo todas las miradas considerando las diferentes necesidades de cada lugar.