“En un mundo donde la muerte es el cazador…casi nunca nos damos cuenta de que podemos suprimir cualquier cosa de nuestras vidas; en cualquier momento y en un abrir y cerrar de ojos… [Por lo tanto…] no hay tiempo para dudas ni lamentos… [Una guerrera] debe aprender a hacer que cada acto cuente, pues va a estar aquí… un tiempo…demasiado breve para ser testigo de todas las maravillas que existen.” (Carlos Castaneda, Viaje a Ixtlán)
El viernes 11 de mayo el Liceo Experimental Manuel de Salas celebra el Día del Estudiante, instaurado por el MINEDUC en 1992 para reconocer el valor y proyección de los Centros de Alumnos y Alumnas de la Educación Media, organizaciones que fueron perseguidas e inhabilitadas por la dictadura cívico militar en 1973.
Este año, la comunidad educativa dedica esta conmemoración, y todo su afecto, respeto y apoyo, a nuestra querida estudiante Andrea Véjar Rojas, del 8° Año D, quien prontamente volverá a ser una de nuestras niñas cuyos ecos se descuelgan por salas y patios en busca de espacios donde permanecer como testigos de la vida.
Andrea, a quien la existencia ha asignado la dura tarea de hacernos sentir el dolor y el frío de lo inesperado, lo incomprensible y lo demoledor, será para la historia de nuestra Institución no solo un nombre completo que representa un acontecimiento que nos ha conmovido y herido en lo profundo, como tantos otros, sino también –y primordialmente– la estudiante que representa el inconmensurable valor de la resiliencia, la esperanza, el arrojo, la disposición para “aprender a hacer que cada acto cuente”; de la guerrera cuyas armas nada ni nadie podrá despojar: la alegría, la reflexión, el ánimo creativo, la empatía, la aceptación, la humildad, la sabiduría. Sabemos que no será fácil el proceso, pero “no hay tiempo para dudas ni lamentos”.
Por eso, firmamos simbólicamente en este Día del Estudiante 2018 un decreto de acompañamiento en este largo pero también breve camino que Andrea inicia en el LMS, para que su búsqueda de “todas las maravillas que existen” sea una experiencia que ella pueda compartir hasta su último día de clases como alumna del Manuel de Salas.
Hacemos extensible este saludo y reconocimiento en este Día del Estudiante LMS 2018 a sus padres María y Mario, así como a Pablo, su querido hermano. A su familia, amigas y amigos y a todas y todos quienes estuvieron, están y estarán junto a Andrea el diario ser, estar y hacer en un mundo en el que nada está escrito de antemano respecto del verdadero aprendizaje.
